El Sevilla es un equipo pesado, rocoso, y difícil. Juande, viendo el desaguisado de Londres, decidió rescatar el trivote, con libertad de movimientos para Renato. Suya fue la única ocasión del Sevilla, que dio en el palo.
La primera parte fue totalmente de tanteo; un juego muy lento y físico, donde resaltaron Messi e Iniesta.
Messi va camino de convertirse este año en el mejor jugador del mundo, sin ningún tipo de dudas. A su vez, Iniesta responde en el campo. Hay que ponerlo siempre; recupera, da, tiene verticalidad, es un auténtico lujo.
La segunda parte se decantó de parte del Barça. El Sevilla seguía a lo suyo, encerrado en su campo, en ocasiones hasta insultando al fútbol.
La desaparición de un pésimo Xavi y la entrada de Giovani, le dieron más brío al equipo. Henry -aún al 50%- renació, y Messi e Iniesta se pusieron el equipo a las espaldas
A partir de ahí, Leo eclipsó a todos, con un control digno de dioses, y fusiló a Palop. En ese momento el Sevilla miró al horizonte y observó a una defensa inconmensurable, donde destacan dos chicos de color, Abidal y Touré, que van a dar muchas alegrías a los aficionados blaugrana esta temporada. En ese momento, supieron que todo estaba perdido.
Este miércoles más; en el Camp Nou. No obstante, la primera piedra de toque llegará en el campo del Levante. Seguiremos informando
Jose Álvarez Pérez
No hay comentarios:
Publicar un comentario